Los primeros meses del año no podía caminar, ansiaba salir de mi casa y tener energía para la vida diaria.
 
No hay nada mejor que la naturaleza para recargar pila; ya sea en el campo, en el bosque, o en algún parque es más fácil conectar con nuestra esencia por medio de los sentidos.
 
Tan sólo caminar sobre el pasto te puede hacer sentir más vital, escuchar el sonido del agua corriendo es sanador y limpia nuestra energía, estar debajo de la sombra de los árboles nos recuerda los contrates de la vida.

 

Después de visitar granjas, ranchitos, lagos, zoológicos al aire libre y pasar unos días en la hermosa Pennsylvania llegué a la siguiente conclusión; cuando te acercas a la naturaleza, te acercas a ti mismo. Tienes la oportunidad de restaurarte y encontrar tu propio equilibrio.

El ninja verde (Ninjago) tenía razón cuando decía que «verde es el color de la vida que fluye a través de nuestros cuerpos».