Es maravilloso ver el cambio de estación y lo bonito que es todo en esta temporada, si bien hay calor y tenemos jacarandas y flores por doquier, también tenemos granizo y lluvia en mayo.
 
Yo tuve una tormenta inesperada de ansiedad cuando empecé a trabajar en serio el duelo por la pérdida de mi bebé.
 
En un principio me convencí de que todo estaba bien y me distraje con las vacaciones, después cuando pensaba en eso trataba de ver lo positivo y cuando finalmente sentí la necesidad de hablarlo me sentía muy tonta, como si se tratara de un problema menor.
 
No puedo decir con precisión cómo se siente, simplemente hay días buenos y malos, lo que es cierto es que el duelo duele es difícil de entender, aveces difícil de aceptar pero es parte de la vida.
 
Eso trae a mi mente un fragmento hermoso de Rayuela, escrito por Julio Cortazar.

«A veces uno amanece con ganas de extinguirse… Como si fuéramos velitas de un pastel de alguien inapetente. A veces nos arden terriblemente los labios y los ojos y nuestras narices se hinchan y somos horribles y lloramos y queremos extinguirnos… Así es la vida, un constante querer apagarse y encenderse».

Algo que enciende mi corazón profundamente es escribir este blog y poder compartirlo con ustedes, gracias por sus comentarios, me hace muy feliz que les guste lo que leen.

En junio tengo preparados diferentes posts, uno sobre cómo inició mamá sin recetas, otro con tips para conocer Baja en tiempo récord, y uno más de las ventajas del súper en línea.

Deseo que tengan un junio maravilloso.

Con mucho amor,