Amarás a tu cuerpo por sobre todas las cosas
El título de éste post para mi es un mantra que me repito todos los días. Antes pensaba que si comía “bien”, hacía ejercicio y llevaba una vida “saludable”, no merecía tener “éste cuerpo”. Muchas comillas ¿cierto?, ¿qué tipo de cuerpo pensaba que me merecía?. Sin duda, uno diferente.
En septiembre del 2015 busqué ayuda en una Clínica de Trastornos de la Conducta Alimentaria, y gracias al tratamiento en el que estoy hoy me siento bien físicamente; mi piel volvió a tomar color, se me dejó de caer el pelo de forma excesiva, deje de estar cansada, dormida, sin ganas de nada, sin motivación y recuperé la confianza en mi.
Aún tengo días complicados; en los que el tema de la comida me sobrepasa y veo mi imagen distorsionada; restrinjo la comida, estoy ansiosa, obsesiva y tiendo a ser perfeccionista.
También hay días regulares; en los que como adecuadamente pero todos los grupos alimenticios dan vueltas en mi cabeza, y me tengo que apegar a un plan de alimentación estructurado para mantener la calma.
Finalmente, los días buenos; en los que como libremente lo que mi cuerpo necesita, el aspecto de mi cuerpo es lo último en lo que pensaría, me acepto toda o en partes, aprecio muchísimo ser una persona sana.
Afortunadamente cada vez son más los días buenos. En el proceso de recuperación he aprendido a pedir ayuda, a entender que cuando crees que das un paso atrás es porque estás a punto de dar dos pasos hacía adelante. He tenido que ser paciente y aceptarme como soy, evitar las comparaciones y reconocer aquello que me hace única.
El cuerpo habla; te dice lo que necesita; llorar, gritar, cantar, sanar, cansarse, reposar, comer ciertos alimentos que de verdad te hacen sentir bien o tener una dosis de “comfort food”.
Honrar a nuestro cuerpo es reconocer sus necesidades, ubicar en qué momento de la vida nos encontramos (infancia, adolescencia, embarazo, post parto, etc.) , respetar cuando está cansado, enfermo o recuperándose y disfrutar cuando está sano y vibrante.
Amar a tu cuerpo por sobre todas las cosas es nutrirlo con comida y emociones saludables.
